Tomando como premisa el deseo y la responsabilidad que todos tenemos, a partir de nuestras diferentes especialidades, de sumarnos a la incesante búsqueda de la paz y todo lo que significa a nivel mundial este anhelo; desde mi perspectiva, me permito exponer algunas consideraciones sobre cómo el Catastro contribuye a esta notable causa, a la Paz.

Teniendo el Catastro información clara y precisa sobre la propiedad y el uso de la tierra, esta importante herramienta les ofrece a los gobernantes la posibilidad de garantizar la distribución proporcional de recursos. Además, permite que las tareas de desarrollo urbano y rural se realicen de manera eficiente. Ello es posible gracias a que el Catastro dispone de bases de datos y Tecnologías de Información Geográfica (TIG), que les otorga un mayor sustento a la hora de tomar decisiones. Y de esta forma lograr con mayor solvencia la dotación de infraestructuras e instalaciones de servicios públicos que permiten mejorar la calidad de vida de la ciudadanía, aspecto que supone paz.

La información geográfica demográfica proporcionada por el Catastro, ayuda a identificar áreas vulnerables en un territorio. Un registro catastral actualizado y preciso puede asistir de manera indiscutible en el establecimiento de límites claros entre diferentes propiedades y comunidades o áreas de protección. Ello ayudará a prevenir conflictos, además de promover un aprovechamiento pacífico del territorio, mejorando la confianza e incluso la colaboración entre las partes interesadas, constituyéndose definitivamente, en una herramienta importante que promoverá la paz y la estabilidad en un determinado territorio.

Catastro y paz
Catastro y paz

 

El registro preciso y debidamente actualizado de la propiedad de las tierras, ayuda a identificar de manera clara y documentada a los propietarios legítimos de una tierra y, por lo tanto, establecer definitivamente quién tiene derecho a ella. Eso es promover paz.

La información proporcionada por el Catastro sobre el uso y tenencia de la tierra, puede ayudar a identificar, si una cantidad determinada de ella, está siendo utilizada o aprovechada de manera ilegal o si incluso ha sido despojada. Consecuentemente, la información oficial y precisa sobre la propiedad de la tierra, permite investigar avasallamientos o despojos y servir como evidencia técnico-legal en dichos casos, como también puede ayudar a mediar y solucionar controversias entre las partes interesadas, en la búsqueda de una debida solución pacífica y justa.

Se prevé que con la aplicación creciente de metodologías que apoyen la operación catastral, que incorporan la participación ciudadana, el diálogo, la mediación de conflictos, entre otros, este servicio se vuelva dinámico, eficiente y favorezca a cada vez más personas que merecen paz.  

 

Rafael Beltrán Ramallo es consultor en Administración de Tierras